¿Puedo ir al gimnasio estando de baja médica?

¿Puedo ir al gimnasio estando de baja médica?

Qué dice la ley y cómo lo interpretan los tribunales

Ir al gimnasio mientras se está de baja médica genera muchas dudas entre trabajadores y empresas. Desde el punto de vista legal, no está expresamente prohibido, pero sí está condicionado al tipo de dolencia y a la buena fe del trabajador.


El deber de buena fe durante la baja médica

El artículo 20 del Estatuto de los Trabajadores obliga al empleado a actuar con buena fe durante toda la relación laboral, incluso cuando se encuentra de baja. Esto significa que no puede realizar actividades que perjudiquen su recuperación o pongan en duda la veracidad de su enfermedad.

Si la empresa detecta conductas sospechosas, puede abrir un expediente o incluso contratar un detective privado para comprobar si la actividad es compatible con la baja. En caso de demostrarse que el trabajador ha actuado de mala fe, podría enfrentarse a un despido disciplinario procedente.


Lo que dice la jurisprudencia

La jurisprudencia del Tribunal Supremo aclara que acudir al gimnasio no implica automáticamente un incumplimiento. Todo depende de la enfermedad y del tipo de ejercicio.
Por ejemplo, una persona con depresión puede beneficiarse del ejercicio físico moderado, mientras que un trabajador con una lesión muscular podría agravar su dolencia si realiza entrenamientos inadecuados.

Por tanto, cada caso debe analizarse individualmente, teniendo en cuenta el diagnóstico médico y las actividades realizadas.


Recomendaciones legales para el trabajador

Desde Abogados Tenerife recomendamos actuar siempre con prudencia y transparencia durante la baja médica. Antes de ir al gimnasio, conviene consultar con el médico si la actividad es compatible con la dolencia. También es recomendable informar a la empresa, para evitar malentendidos o conflictos laborales.

En caso de duda, lo mejor es buscar asesoramiento legal especializado. Un abogado laboralista puede valorar la situación y evitar consecuencias como sanciones o despidos.


Conclusión

Ir al gimnasio durante la baja médica solo es legal si no impide la recuperación ni contradice las indicaciones médicas. La clave está en actuar de buena fe y mantener una conducta coherente con la dolencia.

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